"Para despistar"

He decidido incluir una nueva sección, en formato lista, sobre las maniobras de distracción informativa que se ejecutan en España para despistar a la opinión pública. El objetivo es facilitarnos a todos los ciudadanos el día a día y no dejarnos pensar en los avatares negativos que en términos económicos nos sacuden. Por supuesto comienzo con la Cumbre del G-20.
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Dulce de maíz con espuma de cerveza negra

Es tan solo el nombre del postre que degusté este fin de semana en uno de los hallazgos culinarios de este año, el restaurante Izurpi.
Izurpi está en Cabrerizos, un pueblín a cinco minutos de Salamanca.
¿Qué cómo llegué allí? Pues buceando en la Red, buscaba algún sitio para comer estupendamente en la ciudad charra, di con un par de posts de personas que habían comido allí. Además de las alabanzas que habitualmente me resultan sospechosas, encontré la página del mismo y la sencillez de esta acabó por decidirme y vencer mi natural desconfianza.

Ahora es donde debería simular una formación en crítico gastronómico y empezar a decir "una carta más que correcta", "unas raciones adecuadas" y todo la retahíla de palabros. Simplemente decir que el rabo de toro es insuperable; el atún rojo, ídem y las manitas están de escándalo.
Se me olvidaba, el precio es más que razonable y el servicio, genial.

Una manera diferente de echarse una Guiness.
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Me he comprado un pulpo

Claro está que no puede ser como animal de compañía, ya que lo compré "cadáver" en la pescadería. Hacía tiempo que no me encontraba tan animada con una adquisición, supongo que es debido a que mi vida de compradora no está para muchas alegrías últimamente y cualquier cosita desborda mi ego de "shopper".
Apenas lo tuve entre mis manitas, seguí los consejos de mi gurú en cefalópodos, Adela (es un nombre supuesto, faltaría más), de meterlo en el congelador para evitar que a la hora de hervirlo se quedase duro. Inmediatamente me puse en contacto con toda mi familia para comunicar esta nueva adquisíción, recibí consejos de todo tipo desde "apalear" al animal hasta meterlo en la lavadora y centrifugar con el dentro. Sin vacilar me incliné por la solución de la experta, congelarlo. Supongo que temía que los amigos de "la Bardot" se enterasen de estas prácticas y saliéramos en los papeles.
Ahora, tengo un "frozen octopus". Suena como a película de Bond y aporta a mi vida un toque de glamour que los dos kilos de boquerones, que también compré, no han sabido darme.
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Mendicans, mendicantis

Desde que España decidió por boca de sus gobernantes que teníamos que estar sí o sí en la refundación del capitalismo en la próxima reunión del G-20, hemos asistido al nacimiento de una nueva "orden mendicante". Aún nos falta el visto bueno de Roma pero tan solo es tiempo. Tiempo es lo que tenemos de sobra, ya que la crisis que tenemos encima va para largo y cuando más tiempo tengan a la opinión pública distraída, menos se va a exigir a sus representantes políticos.

Desde que todo esto comenzó, no dejo de pensar en lo bien que nos hubiese venido tener en España el mito del Chupacabras. Ese mito que sale a relucir cada vez que los gobernantes tienen un "papelón" que esconder y deben mantener a la ciudadanía entretenida para que la ineficiencia de sus actos y la puerilidad de sus recetas anticatástrofe no lleguen con nitidez a los ciudadanos. Si hubiésemos tenido al Chupacabras dentro de nuestro imaginario, no hubiésemos dado una imagen tan lamentable a nivel internacional tan solo para tratar de tapar lo evidente, la caída del nivel de vida de los españoles y la falta de recetas por parte de los actores implicados en su resolución. También es cierto que no se hubiese sostenido mucho tiempo pero algo se les ocurriría para alargar la fábula.

Ahora tenemos que asistir a las declaraciones que corren en boca de los próceres de la patria donde se nos revela que la presencia española en la cumbre es el hito diplomático más importante de nuestra historia reciente. ¡Hombre! yo tengo memoria de pez pero se me ocurren algunos como la Conferencia de Paz de Madrid sobre Oriente Medio a principios de los noventa o las negociaciones y la entrada en la antigua Comunidad Económica Europea.

Creo que se me escapa la trascendencia mundial de este "magno" logro. Creo que no soy demasiado ambiciosa, pero al igual que muchos españoles, solo quiero llegar a fin de mes, empezando por este mes de noviembre.

Me despido con la frase famosa de " Señores, menos samba y más trabajar" con acento brasileño incluído (esto va por la presidencia de Lula del G-20).

El 5 de noviembre comienza el mundo

Algunos seres humanos viven atormentados, otros espectantes y los más vivimos sin reparar en lo inevitable, el fin del mundo. Hoy es 4 de noviembre y creo que debemos estar viviendo ese día y no nos hemos dado cuenta, ¿por qué?
Porque mañana, si gana Obama, será el comienzo de una nueva era o eso al menos es lo que los medios de comunicación nos han estado diciendo durante el último año.

¡¡¡Mañana comienza de nuevo el mundo y yo con estos pelos!!!
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